El Facebook. Un mundo que se abre delante de ti en la pantalla del ordenador. Un horizonte sin fin de grupos a los que unirse o de los que hacerse fan: Frente de Liberación de Enanos de Jardín, Bic Naranja y Bic Cristal, Mover el dedo como una negra, Morcilla de Burgos, Mi extraordinaria belleza no ha influído para nada en mi éxito profesional, Iba a tomarme una caña y me lié, Venderle un bocadillo a Jordan… reiniciar ordenador, apagar y encender router…
Un montón de chorraditas que no sirven para nada, sino para echarte unas risas. Ok. De acuerdo. Empiezas a agregar a gente. Tus amigos, gente que conoces por la red y que comparte contigo las mismas idas de olla, tus compañeros de la universidad, los compañeros del trabajo… Y ahí empieza el cacao meravigliao.
Uno de los mandos intermedios de mi trabajo me mandó una solicitud de amistad y lo agregué. Es un poco capullín, pero me llevo bien con él: nuestra guerra dialéctica está llegando a límites insospechados. Y es que si me encuentro una persona que es capaz de soltarme una contrarréplica y dejarme tirado, tiene todos mis respetos. Nada más que nos falta escupirnos a la cara y ya, hermanos de sangre.
Ok. Perfecto. Peeeeero aquí el caballero, obviamente, tenía agregada a más gente de mi trabajo. Principalmente jefes de sección. Una de ellas me mandó una solicitud. Pasé de agregársela, hasta que empezó a tratarme de una manera algo sicótica dos días que me crucé con ella. Total, que la terminé aceptando, tampoco era para tanto… Ya se asustará cuando empiece a ver lo freaky que soy.
Y ahora me llega otra solicitud. La de la jefa de mi jefa. Tocotó. Strange, but truth. Somos alrededor de 500 personas trabajando, lo que no es obstáculo para que en el departamento donde trabajo nos conozcamos la mayoría por el nombre. La chica en cuestión es maja, incluso creo que fuera del ambiente laboral seríamos los compañeros perfectos de juerga. La cuestión es que resulta ser la jefa de mi jefa. La tercera gran cabeza que hay por encima mía, una persona que puede decidir el futuro de mucha gente con un sólo gesto.
No es que espere prosperar mucho en mi trabajo, aunque tampoco quiero estrechar (más aún) las posibilidades de un cambio, por aquello de no cerrar puertas. Parece que al final voy a ser un bicho raro por tener claro distinguir mi vida laboral de mi mundo personal…
[Canción recomendada: Julio Iglesias “Bamboleo”]
21 Aeroguatutadas:
Facebook no, Facebook no, aaaaahhhh!!!
Es que el Facebook me da miedoooo!!!
El facebook lo carga el diablo...
*Feer: Y es para que te dé miedo si te paras a pensar...
*HM: Estoy empezando a darme cuenta de que sí.
Por eso yo a mis compañeros del curro fuera de la empresa ni los saludo... ¿Será esa la razón de mi fama de borde?
(Ventajas de ser jefecillo) Jejeje
Me da la impresión que con el Facebook me pueden controlar, así que... Vade Retro!!
Me las voy a agregar...
*Gárgamel: Yo es que me gustaría ser más antisosiá de lo que soy, pero no puedor, jorl...
*El Escriba: No, no es eso. Sólo hay que saber a quién agregar y a quién no.
*J-Vol: Eso, yo te paso los nombres y luego me criticáis a mí, peacho cabrón.
La mejor red social es el FLU. Y tú formas parte de ello, oye....
Bikachus
Yo no sé lo que es el facebook...
Lo que yo decía, Abuelita Paz once again.
*Doble Te: A mí mientras me toque algún bukkake, yo feliz y con los niveles de calcio por las nubes...
*Coxis: La versión tuenti para treinteañeros.
A veces más vale ser un poco Abuelita Paz. Algo ganaríamos. Y no para disgustos.
Este post es un empujón a mi decisión de no hacerme de esas cosas. Kita, kita.
Y lo de la jefa de la jefa, no será para tenerte controlado.
*Murciana Marrana: Estoy pensando en borrármelo. No te digo ná y te lo digo tó.
*El Loco: A mí y a todo el mundo.
Dos meses duré yo en Feísbuk hace ya un año casi, cuando empezaron a llegarme invitaciones de gente que no me conocía de nada, pero que estaba en un par de grupos en los que yo estaba, dije: "hasta aquí, maricarmen, que esto me van a pedir enseguidica el fijo de mi casa y los papeles y no".
Como han dicho otros, es como un arma, que a ambos los carga el diablo.
El Caralibro lo carga el diablo. Tiene un peligrooooo...
Perdona, pero apesta, yo que tu, anulaba el perfil YAAAAAA....!
Hazme caso....salvate :P
Yo es que estoy un poco enfadado contigo porque hace mucho que no comentas mi estado en facebook, sabes?
Yo tengo los mismos dilemas con facebook, comencé a añadir gente con la que trabajaba, luego cambias de trabajo, y hace lo mismo... Y ya llega un momento que el facebook se convierte todo un peligro, que si compartir cosas de trabajo es peligroso, que si la competencia puede leerme, que si mi vida privada a toda luz... Ahora toca pensarmelo dos veces antes de añadir algo nuevo a mi perfil. Pena, penita, pena.
mi admirado skyzos ya conoces mi vicio por crear grupos a cada cual mas raro, respecto al facebook pues simplemente una chorradilla mas la verdad aunque como bien dices pronto intui el peligro y borre mis apellidos reales y los sustitui por mi nick, la verdad no me apetece que me aparezcan repentinamente solicitudes de gente de trabajo, antiguos compañeros de estudio etc etc etc, hay islas en las que uno prefiere otro tipo de compañías ;)
Es terrible esto del Facebook.
El mío es como una guillotina, todo el que tengo agregado del trabajo acaba despedido.
Los que mas me gustan son los espías de Facebook, los que miran perfiles si crear o usando el de otro.
*Meg: Yo no sé lo que voy a durar. Sé que es una gilipollez, pero estoy enganchadísimo.
*Peri: Talmente.
*Fanmakimaki: Ea, pero buscadme algo de metadona para el síndrome de abstinencia.
*Proudstar: A partir de ahora, cada movimiento que haga, será comentado puntualmente.
*Efesor: Yo ya he rechazado a unos cuantos, parece que ya no me da tanta pena.
*Efesor: Por eso dejé yo lo más vulgar de mi nombre, que como hay por ahí millones pululando con las mismas señas de identidad.
*Chiringui: Espero no estar entre los afortunados. O sí. Nunca se sabe.
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