Samabudi

El viernes noche le di carpetazo a los apuntes durante unas horas (lo siento Sr. Leñador…) Había quedado con once trastornados más para irnos de cena y recuperar un poco el ritmo que, por nuestra propia salud mental, habíamos paralizado (con los preparativos del Canomori los veía más que a mi propia familia, y no es coña). Quedamos en Beautiful-View como punto de partida, destino a un merendero perdido en la huerta de Murcia… Después de un pseudorally entre bancales y casa de planta baja, llegamos al sitio. Bajamos de los coches, esperando una enorme hoguera junto a una fiesta de la espuma (lo más de lo más en las festividades de pueblo) y nos encontramos un mero equipo regurgitando reggetón con cuatro orcos preadolescentes alrededor. Pero como somos gente de mundo, entramos dignamente en el merendero en cuestión.

Y cuando digo “merendero en cuestión” me refiero a un solar vallado con gravilla en el suelo y una mesa con cuatro viejos con chatos de vino, dominó y palillo de serie en “los dienteh”, como diría Violeta La Burra… La mesa de al lado era, evidentemente por la afluencia de clientela, la nuestra. Lo que no sabían los jubilados era lo que se les venía en cima: que si un “Bic naranja escribe fino, Bic cristal escribe normal, Bic, Bic, Bic…” por aquí, que si un “Close-up, Close-up, ah-aaaaaah… ¡verde menta!” por allí… Ya nos miraban medio raros, pero cuando Meg, la Sra. Amparo y yo nos pusimos a cantar el gran hit de Bruno haciendo coreografías sin levantarnos de la silla fue el acabose: “Te doy, te doy, te doy lo más; de mí a ti al borde del abismo yo te doy…”

Habíamos llegado, habíamos puesto la bandera, habíamos reclamado aquel sitio como nuestro.

Entre chiste y confidencias, nos metimos entre pecho y espalda la cena que nos preparó, sirvió y amenizó la dueña-cocinera-camarera-cajera-y-mujer-para-todo, que nos recordó, de una manera entrañable, a la Raimunda de “Volver” (está claro que al personaje, que, a pesar de conservar belleza, no era Penélope Cruz). Nos puso al día de que no había hogueras este año, pero que la semana que viene venían “varios conjuntos de ró a tocar”

¿Lo mejor de la noche?:

_Un secreto_ La Pastora de Dragones nos confesó que, en su adolescencia, tenía un programa de radio los fines de semana llamado SAMABUDI (“SAbroso, MArchoso, BUeno y DIvertido”, ejem), con entrevistas a gente de su pueblo y concursos donde sorteaban cintas pirateadas de La Pantoja…

_Una nueva locura_ El presentarnos al casting de O.T., todos con la camiseta del Canomori, cantando “¿Quién es ése hombre?” Sarassa’s version… O los 11 a la vez o uno detrás de otro (uno en plan bolero, otro en plan ranchera, el tercero rapeando, el cuarto con una guitarra) Lo que no se le ocurra a la Baccara Negra…

A éstas alturas de la noche, yo me tuve que volver, cual calabaza de Cenicienta, a casa, porque tenía que estudiar. Pero ellos siguieron la noche. Y la Sra. Amparo fue su cronista y visto lo visto, o saco una notaza en el examen o no merece la pena el espectáculo que me perdí.

*Actualización: Y para la tercera parte del finde, aquí tenéis las crónicas de Meg. Que aproveche.

[Canción recomendada: Koop feat. Yukimi Nagano “Summer Sun”]