El poder de la situación (I): Obediencia a la autoridad





El ser humano es raro.

En Psicología Social hemos visto cómo el entorno puede influenciar en las personas. Este tipo de análisis parte de tratar de explicar el ascenso del nazismo y todas las atrocidades que, en nombre de él, se cometieron. Cómo personas que vivían puerta por puerta, un día después se pueden convertir en enemigos, en torturador y torturado. De varios experimentos realizados se puede deducir que, ante la necesidad de no ser rechazado por el grupo al que se pertenece, se obedecen órdenes de la autoridad hasta extremos inhumanos y sádicos. Experimentos que hoy en día están prohibidos… en mi humilde opinión, creo que se podrían situar en la barrera de la tortura psicológica. Y no estamos hablando del Doctor Mengele.

Milgram, profesor de Psicología de la Universidad de Yale, realiza una investigación sobre la obediencia de la autoridad disfrazada de un experimento sobre el aprendizaje y la memoria. El sujeto experimental, de acuerdo con las normas recibidas del responsable del laboratorio (con señas de su estatus superior tales como llevar una bata blanca o el propio prestigio de dicha universidad), actuaría como si fuese un profesor, castigando a través de descargas eléctricas las equivocaciones de un segundo sujeto (quien era miembro del equipo de Milgram y sí sabía que todo era una farsa.) El "profesor", a los mandos de una máquina de castigo conductual, aplicaría una descarga que iría creciendo en voltaje conforme aumentasen los errores, hasta llegar a umbrales potencialmente mortales. El "alumno" estaría en otra habitación y simularía el sufrimiento de las descargas, gritando y chillando ante el supuesto dolor.


Antes de realizar el experimento, un equipo de expertos llevó un estudio preliminar donde estableció que la mayoría no llegaría a los 180 voltios y un mínimo porcentaje (un 10%) podría subir algo más (la “intrusión del sádico”) entre el grupo de sujetos. La realidad fue bien distinta: se comprobó que el 65% de los sujetos que participaron como "maestros" en el experimento administraron el voltaje límite de 450 a sus "alumnos", aunque a muchos les situase el hacerlo en una posición absolutamente incómoda. Ningún participante paró en el nivel de 300 voltios, límite en el que el alumno dejaba de dar señales de vida. Ninguno se enfrentó a la autoridad. Ninguno se levantó de la mesa y abandonó la sala. Y ninguno se acercó a comprobar si el “alumno” seguía vivo tras finalizar la sesión de descargas.


Cuando se les explicó la finalidad del estudio, incluso llegaron a justificar los castigos inflingidos al propio “alumno” por su falta de memoria. Ellos no eran culpables, eran un mero instrumento. Un instrumento que no se rebeló.

El experimento planteó preguntas sobre la ética de la experimentación científica en sí misma debido a la tensión emocional extrema sufrida por los participantes (aunque podría decir que dicha tensión fue provocada por sus propias y libres acciones.) La mayoría de los científicos modernos considerarían el experimento hoy inmoral, a pesar de que dio lugar a valiosos estudios sobre la psicología humana.



[Canción recomendada: Second “Nada te dirige”]

17 Aeroguatutadas:

Meg 12 diciembre, 2006 09:24  

El problema está en que en determinados trabajos tienes que callar y tragar como un puto esclavo, porque te arriesgas a perderlo definitivamente. Véase los trabajadores inmigrantes sin documentación para residir y trabajar, que cobran sueldos miserables en condiciones infrahumanas para llevarse 30 euros a casa y poder comer ese día.

Afortunadamente puedo decir que no he hecho nada en contra de mi voluntad en mis escasos trabajos, afortunadamente sólo cuestioné una vez la autoridad, porque la Autoridad 2 cuestionó el trabajo que me había mandado hacer la Autoridad 1. Yo me entiendo.

Sr_Skyzos 12 diciembre, 2006 10:57  

Me has dado una perspectiva diferente a lo que había escrito... Me has descolocado, pero gracias.

Anónimo 12 diciembre, 2006 13:32  

En mi empresa lo he comprobado muchas veces. Si vas de sport y pides que hagan algo, lo apuntan en la lista de "ya lo haré cuando tenga tiempo/ganas". Si voy con chaqueta y corbata, en diez minutos lo tengo sobre mi mesa.
Son muy curiosos estos experimentos.

Anónimo 12 diciembre, 2006 14:56  

Me hace mucha gracia que comentes esto porque ya lo habia leido hace algun tiempo y seguia dandole vueltas en la cabeza de vez en cuando. Aparentemente muchos de los participantes en este esperimento siguen hoy en dia teniendo tratamiento psicologico. En muchos programas de camara oculta han seguido una version mucho mas amena de este esperimento y de como nadie quiere ser la oveja negra en el rebaño o quedarse fuera del grupo. Lo que mas gracia me hace es que el MARKETING de hoy en dia ha cogido muchas de estas tecnicas sobre el comportamiento y lo utiliza de manera muy sibilina para crearnos muchos complejos y vendernos mas soluciones. SAN

Sr_Skyzos 12 diciembre, 2006 15:48  

*Enebro: Se hicieron diferentes variaciones del mismo experimento, con resultados disímiles si se hacía en un sitio con una impostura académica (batas blancas, laboratorios) a otros lugares con menos autoridad (un sótano semioscuro)... es cierto.

*San: Espérate a la segunda parte de este post. Todo viene a colación de un vídeo que nos pusieron en clase, presentado por Zimbardo (del que va esa segunda parte) y te tenías que reír en su cara cuando decía que a los sujetos del experimento no le quedaron secuelas, que incluso estaban agradecidos por demostrarles facetas oscuras de su propio yo. Evidentemente, tenía que defender SU experimento, pero sí quedaron secuelas (nada más que hay que ir a otras fuentes para comprobarlo); si no, no entiendo como de pasada en el mismo vídeo hace mención que, después de el experimento de Milgram y el suyo, no se ha permitido hacer ninguno más del estilo. O por lo menos, no se han reconocido sus resultados en la comunidad científica.

Mara Jade 12 diciembre, 2006 16:22  

Aaaaaaay psicología social... aún no la tengo aprobada.

Estas mismas "excusas" son las que pusieron en su momento los ex-mandamases nazis y los que pondrán los amigüitos del fallecido Pinochito.

Qué tristeza de seres humanos!

Sr_Skyzos 12 diciembre, 2006 16:56  

Los recovecos del alma humana son muchos y varios. Y a mí cada vez me están entrando más ganas de releerme "El señor de las moscas".

J-vol 12 diciembre, 2006 20:58  

No hacia falta un estudio para saber que el poder corrompe y saca lo peor de uno...ya verás el dia que me dejen llevar un espray de pimienta en el curro...¡gastaré más espray que Divine en laca!

Anónimo 12 diciembre, 2006 20:59  

Ya había leído algo sobre ese experimento y me parece muy fuerte pero no me sorprendo de los resultados. La mayoría de la gente es incapaz de salirse del rebaño por su cuenta, los que lo hacemos (que no estoy diciendo que yo sea mejor que nadie, ojo) somos tachados de raritos, ovejas negras o algo peor, pero a estas alturas de mi vida, me la pela mucho. "Digan lo que digan, los demás..." (Raphael dixit)
Besitos estrellados

Sr_Skyzos 12 diciembre, 2006 22:23  

*J-Vol: ¡¡¡Blasfemo!!! ¡¡¡No pronucies el nombre de Divine en vano!!! Aunque, pensándolo bien, lo mismo hasta te copio la idea para esos sábados donde la gente (que es como rebaños) va al Ikea a pasearse...

*Casiopea: Sí que es fuerte, sí señor. Y los que no se adaptan al grupo, son expulsados o devorados por el resto. La naturaleza y su sabiduría...

Burnout. 13 diciembre, 2006 10:42  

Creo que lo he leido en otro blog o noticia, no me acuerdo, pero sí, es cierto que el 65% de los estudiados se sentían intimidados por un mero uniforme; En eso se basa la psicología militar: reforzar ese comportamiento a la manera conductista con castigos corporales y mentales, para condicionar una entrega total a las órdenes. Si 2/3 de personas normales cayeron en la tentación de castigar, ¿Que me puedes decir de soldados condicionados a obedecer y en su mayoría en estado de permanente estress, ansiedad y neurosis de guerra? (Como se ha comprobado en guerras modernas)
Con esto no digo que "pobrecitos" los nazis, porque quienes les dieron las órdenes no estaban bajo ese estres traumático y pensaban friamente, pero el soldado de a pié, supongo que hizo lo que le ordenaron. Cuando está a flor de piel instinto de supervivencia y la sensación de poder matar al prójimo, las barreras se desdibujan. Yo creo que todos somos capaces de matar si se nos da un motivo suficiente. El hombre, cuando es grupo y un líder se responsabiliza de sus actos es capaz de lo mejor y de lo peor... Seguimos reaccionando como una manada en torno al macho dominante. Creo que esta en los genes del hombre (de la mujer no puedo hablar todavía, no hay un estudio serio al respecto)ser un animal. Y de todos nosotros depende que siga siendo racional.
Un saludo.

Sr_Skyzos 13 diciembre, 2006 12:48  

Este tipo de estudios, algo maquiavélicos, suelen ser aplicados en ejercicios de control, tipo publicidad o tipo ejército. Por ejemplo, el hecho de ser un número o de afeitarte la cabeza en la cárcel o en la mili. Todo es para despojarte de los rasgos identificativos de ser un individuo para formar parte de una masa.

Anónimo 13 diciembre, 2006 13:50  

A mí es ke me pones una foto de Sayid delante y se me olvida escribir cosas interesantes y profundas ¡¡ Como está el tío!!

Dan Davenport 13 diciembre, 2006 17:17  

A mí me pasa lo mismo que a MM, soy lo bastante superficial como para montarme aquí un discurso científico. Me quedo con la foto de Matthew Fox, lo siento. Por otra parte, el tema expuesto me recuerda al principio de "Los Cazafantasmas", cuando Bill Murray le daba descargas al tipo aquel. También decirte que cuando te pones académica no hay quien te aguante, nena... xD

Sr_Skyzos 13 diciembre, 2006 23:18  

*MM: Por eso las he puesto, ésta y la del post siguiente... Mira que está bueno el jodío...

*Marsónico: La de Matthew Fox la he puesto por deferencia hacia Mi Santo, que es patrón de su agrado. Con el que no puedo es con Sawyer, por mucho que tenga un desnudo más que apetecible.

Y, bonita, no soy un personaje plano, tengo mis aristas y mis otras caras. Dentro de mí hay un empollón que de vez en cuando grita más que la locaza y el superficial que conviven con él...

Dan Davenport 14 diciembre, 2006 15:31  

Jajajaja, me quedo con ambos, tranquilo, que aquí estamos para ser tolerantes. Y por el simple hecho de que no seas única y exclusivamente una tiparraca plana no es motivo para dejar de hablarte ;P

Sr_Skyzos 14 diciembre, 2006 16:58  

Uf, menos mal, creía que me querías por ser un personaje cliché...



Aeroguatutú, que se llama "aero" porque vuela, "gua" por que va por el agua y "tutú" porque, cuando rueda por la carretera, hace "tú...tú..."


Boy Lornsen.


{elaeroguatutu@hotmail.com}